El hombre sin pasado

En el cine se tendrían que implantar las denominaciones de origen como con el vino. Si así fuera, uno de los sellos de mayor calidad sería “Thriller Coreano”: y es que casi cada vez que encuentras estas dos palabras juntas sabes que te vas a topar con una buena peli. El hombre sin pasado es seguramente un filme menos espectacular que algunos de los últimos thrillers que nos han llegado del país asiático, como por ejemplo The Yellow Sea o Encontré al diablo. Pero vamos, sigue siendo brutal.  Su historia te atrapa, su protagonista es un héroe misterioso que reparte hostias como nadie, y la acción va de menos a más hasta un clímax final de esos de levantarse de la butaca y aplaudir durante un buen rato ¡Bravo!


Lo mejor:
la pelea final. Es “la pelea”.
Lo peor: el flequillo del prota pone nervioso. Spoiler: por suerte se lo corta.

Titanic

Creo que no conozco a nadie que no hayan visto Titanic. Y eso es un logro, se mire por donde se mire. Como logro es que una película de 190 minutos no aburra. James Cameron, megalómano por excelencia, lo petó a más no poder con esta cinta dividida en dos partes muy diferenciadas.
La primera de ellas no tiene demasiado secreto: chico pobre, chica rica, un atardecer en el mar, miradas, sonrisas, sexualité y Celine Dion de fondo. Nada nuevo, pero bien jugado. Pero entonces… ¡pum! Iceberg. El barco se hunde y la película hace todo lo contrario. Cameron se casca una hora y media final impecable. Han pasado 15 años y la recreación del hundimiento sigue siendo absolutamente asombrosa.


Lo mejor:
el crescendo de la peli desde que el barco choca hasta el final.
Lo peor: demasiada mujer para tan poco chaval.

El verano de Coo

Que no os engañe el colorido póster, ni el amigable personajillo verde, ni su título: El verano de Coo no es una película para niños. Es una versión adulta de ET, pero en vez de venir del espacio, aquí el protagonista (Coo) viene de un tiempo antiguo, de la mitología japonesa. El film hace una reflexión sobre la conexión con el pasado y de como nos enfrentamos a él hoy en día. Retrata una sociedad que ha sustituido su mitología por la tecnología, y ya no puede entender nada sin ella. Desde la escena inicial el filme te deja helado: es luminoso pero tiene un fondo muy oscuro, incluso violento. Y sobre todo es una película muy triste, melancólica, algo poco común en el cine de animación. Maravillosamente sorprendente.


Lo mejor:
es emocionante de principio a fin.
Lo peor: su ritmo es un poco lento en algunos momentos.

La matanza de Texas

Alguien que vea esta peli por primera vez hoy en día podría pensar “tiene todos los tópicos de una película de terror slasher, la hemos visto 1000 veces”. Pero es que realmente ésta fue la primera. ¡Tobe Hooper hizo la biblia de este tipo de cine! La película huye de la oscuridad del género y centra casi toda su acción a plena luz del día, y eso es lo que la hace revolucionaria y maravillosa. La peli va a cumplir pronto los 40 años pero continúa siendo espectacular. Leatherface sigue persiguiendo al espectador con el mismo ímpetu que el primer día. La locura se va apoderando del film hasta llegar a una cena final que rivaliza con Viridiana de Buñuel. Y ese plano final del monstruo bailando con su motosierra al atardecer… ¿No es precioso?

Lo mejor: un festival de locura que aguanta el paso del tiempo.
Lo peor: pues no se que decir… ¿Sale muy poco la motosierra?

American Pie: El reencuentro

La gran novedad de esta última entrega de American Pie es a quién va dirigida. En esta ocasión el público potencial no son los de adolescentes actuales, sino los treintañeros que hace hace 10 años vieron las primeras entregas de la saga. Ahí está toda la gracia de la cinta. Ellos han crecido. Nosotros también. Jim y compañía ya no son lo que eran. Nosotros tampoco. De este modo, la película funciona más como una reflexión sobre la madurez (apoyada en la presencia de todo el reparto original) que como una comedia teenager gamberra. El problema es que esta mirada al mundo adulto se ha tratado recientemente en varias (y mejores) comedias de la factoría Apatow o Farrelly, y en la presente se hace lo mismo, sin aportar nada nuevo.


Lo mejor:
la aparición, sobre la bocina, de una nueva MILF.
Lo peor: ni divierte ni emociona lo suficiente.

Alps

Aprovecho la crítica de Alps para presentar un nuevo elemento en la página de Palomitos. Veréis que en la parte inferior derecha del póster del film ha aparecido un símbolo con unas gafas de pasta dentro. Es una advertencia: ¡Cuidado, película no apta para todos los públicos! Pero nada que ver con la edad, sino con el tipo de cine: pelis poco convencionales, muy de autor. Cine raro de cojones, vamos. Ya sea bueno o malo.
Pues Alps es así, una peli griega muy sórdida, fría y con unos actores que parecen robots. Sí, todo esto tiene parte de sentido con lo que cuenta, pero la peli no termina de funcionar. Por algún lugar he leído que el film es una comedia, pero yo no se que drogas se había tomado quién afirmó tal cosa.


Lo mejor:
si os gustó Canino, es del mismo rollo.
Lo peor: su rara frialdad te aleja en todo momento.

Arrugas

Uno de los grandes males de las películas de animación made in Spain es que se suele invertir todo el talento en el apartado técnico, dejando en un segundo plano algo tan básico como es el guión. Supongo que los productores pensarán que si el espectador flipa con lo que ve, no se dará cuenta que detrás de tanto 3D no hay una historia sólida. ¿Por qué digo todo esto? Porque con Arrugas pasa todo lo contrario: es grande no por ser una maravilla a nivel técnico, sino por serlo a nivel emocional. La galería de personajes es formidable. Esos ancianos entrañables respiran verdad. Te los crees. Sólo tengo un pero: aunque hay un esfuerzo por alejarse del drama, el tema de fondo es tan duro que no puedes evitar (al menos yo) salir del cine con un importante bajón.


Lo mejor:
las ensoñaciones y recuerdos de Emilio y compañía.
Lo peor: no hacía falta cerrar la peli con esa última escena.

The Pelayos

Perdón por utilizar las mayúsculas, pero es necesario: ¡NO SOMOS AMERICANOS! Es lo primero que se me pasó por la cabeza viendo The Pelayos. Tiene un guión (muy flojo) y unos personajes de película de Hollywood, y eso hace que no te creas nada. Ni Lluís Homar tiene que ser como el Ocean de Clooney, ni Daniel Brühl tiene que hablar y moverse como Brad Pitt. Aquí no soltamos discursitos ni tenemos archienemigos. Aquí todo tiene que ser más cañí, y lo único que funciona en ese sentido es el personaje de Miguel Ángel Silvestre, lo mejor de la peli. Además de ser todo demasiado americano la peli también cumple con el tópico del cine español, y a los 5 minutos ya sale Blanca Suárez enseñando las tetas (en fin, eso que te llevas).


Lo mejor:
la peli entretiene (si no le pides mucho).
Lo peor: una producción con recursos lo desperdicia todo con el guión.